Ester Madroñero: Autora e ilustradora. Siempre ha estado muy vinculada a la literatura infantil, sobre todo ilustrando libros, y ha colaborado con distintas editoriales, publicando mas de diez libros enfocados hacia los más pequeños. Es miembro de la Asociación para el desarrollo de la literatura juvenil. Desde 2003 combina la escritura con su trabajo como librera en la librería infantil Kirikú y la bruja.
La edad de este libro es para primeros lectores, ya que no especifica a partir de qué edad. En la cubierta aparece el niño oliendo una flor y da la sensación de que le gusta. Tiene 36 páginas.
Este cuento trata de un niño que nos va enseñando los olores que va percibiendo durante un día, nos dice si son agradables o no, y de donde pueden aparecer esos olores.
El tema principal son olores, sus características y de donde surgen.
En cuanto a la estructura, en cada página muestra un olor distinto y todas ellas juntas completan el poema en sí sobre los olores. Está compuesto por diferentes poemas, pero que no son independientes, ya que el conjunto de estos forman la historia.
En relación a los personajes que aparecen en el libro, está el protagonista que es también el narrador del cuento. Es un niño pequeño que nos muestra los olores que percibe. También hay personajes secundarios como el hermano, gente de la calle, el padre, etc. Pero en este libro no se especifica como son, sino que aparecen sin ninguna descripción.
El espacio donde transcurre la historia son varios, lugares donde un niño puede pasar todos los días como puede ser el cuarto de baño, una parada de autobús, el colegio, la cocina, un parque, su habitación… El tiempo de la acción transcurre en un día entero.
El lenguaje es sencillo y adaptado a los más pequeños. El vocabulario es amplio, actual y que se utiliza en el día a día. Aparecen muchos adjetivos (olor asqueroso, tierra mojada, perfume elegante, sabrosa comida, bosque inmenso, etc.) lo que ayuda al libro a expresar que es lo que siente el niño al oler ciertas cosas. Utiliza recursos estilísticos como la personificación y la repetición.
Las ilustraciones tienen mucho color y en cada página hay una que corresponde con lo que dice el poema, lo que sirve para entender el poema. Todas las ilustraciones aparecen en doble página. Parece que la técnica utilizada son ceras y acuarela.
En mi opinión es un libro que se puede utilizar en infantil, ya que se presentan olores que ellos a lo mejor no han experimentado y otros que sí y pueden ayudarlos a definir como son. La letra en mayúscula me parece adecuada para darle más interés al texto y facilitar la lectura. Sería un buen libro de poesía que tener en el aula para entretener y que se diviertan leyendo. A partir de él se puede realizar un debate con los niños sobre sus olores favoritos y los que odian, que es lo que suelen oler a lo largo de un día y si les agrada. Luego podemos pedirlos que traigan un objeto que les guste como huele y otro que no, para ver si todos los compañeros están de acuerdo. Para conocer más olores con los niños se pueden hacer múltiples de excursiones para que conozcan olores nuevos.
El tema principal son olores, sus características y de donde surgen.
En cuanto a la estructura, en cada página muestra un olor distinto y todas ellas juntas completan el poema en sí sobre los olores. Está compuesto por diferentes poemas, pero que no son independientes, ya que el conjunto de estos forman la historia.
En relación a los personajes que aparecen en el libro, está el protagonista que es también el narrador del cuento. Es un niño pequeño que nos muestra los olores que percibe. También hay personajes secundarios como el hermano, gente de la calle, el padre, etc. Pero en este libro no se especifica como son, sino que aparecen sin ninguna descripción.
El espacio donde transcurre la historia son varios, lugares donde un niño puede pasar todos los días como puede ser el cuarto de baño, una parada de autobús, el colegio, la cocina, un parque, su habitación… El tiempo de la acción transcurre en un día entero.
El lenguaje es sencillo y adaptado a los más pequeños. El vocabulario es amplio, actual y que se utiliza en el día a día. Aparecen muchos adjetivos (olor asqueroso, tierra mojada, perfume elegante, sabrosa comida, bosque inmenso, etc.) lo que ayuda al libro a expresar que es lo que siente el niño al oler ciertas cosas. Utiliza recursos estilísticos como la personificación y la repetición.
Las ilustraciones tienen mucho color y en cada página hay una que corresponde con lo que dice el poema, lo que sirve para entender el poema. Todas las ilustraciones aparecen en doble página. Parece que la técnica utilizada son ceras y acuarela.
En mi opinión es un libro que se puede utilizar en infantil, ya que se presentan olores que ellos a lo mejor no han experimentado y otros que sí y pueden ayudarlos a definir como son. La letra en mayúscula me parece adecuada para darle más interés al texto y facilitar la lectura. Sería un buen libro de poesía que tener en el aula para entretener y que se diviertan leyendo. A partir de él se puede realizar un debate con los niños sobre sus olores favoritos y los que odian, que es lo que suelen oler a lo largo de un día y si les agrada. Luego podemos pedirlos que traigan un objeto que les guste como huele y otro que no, para ver si todos los compañeros están de acuerdo. Para conocer más olores con los niños se pueden hacer múltiples de excursiones para que conozcan olores nuevos.
Realizado por: Sara Núñez Gamarra
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